Jesús y Moisés, Misterium Magnum, Jacob Böhme

Muy entrañables lectores y lectoras:

Me acerco a todos vosotros para haceros llegar una descripción gnóstica del presente grabado que corresponde a un libro llamado MISTERIUM MAGNUM y el cual hace referencia a…

…JESÚS Y MOISÉS

Jesús y Moisés, Misterium Magnum, Jacob Böhme

El grabado aparece en una edición del año 1682 que reúne algunas obras escritas por el místico alemán Jacob Böhme ─1575-1624─. Lo más probable es que los grabados fueran hechos por Dionysius Andreas Freher ─1649-1728─, un escritor cristiano místico y alquímico famoso por sus extensos comentarios sobre Jacob Böhme. Dionysius Andreas Freher nació en Alemania pero pasó la mayor parte de su vida en Londres, Inglaterra.

Hemos de comenzar por afirmar que este grabado ilustra magistralmente dos figuras que dejaron una huella eterna en la historia del Cristianismo y del Judaísmo original.

Primeramente nos llama la atención el hecho de ver a Moisés abrazando un gran globo representativo de nuestro mundo y rodeado de los doce signos zodiacales. Esto es para indicar que nuestra humanidad se desenvuelve bajo la influencia de los signos del zodiaco, aunque los afiliados al ateísmo se aferren en querer negarlo. Las influencias zodiacales nos influyen para nuestro bien cuando son percibidas por nuestra psiquis equilibrada, empero cuando son recibidas por nuestro mal secretario ─el Yo, el Ego animal─, entonces se polarizan negativamente en nuestras vidas, arrastrándonos hacia la confusión y el caos. De allí la importancia de mantenernos siempre en el RECTO SENTIR, RECTO PENSAR Y RECTO ACTUAR. De este modo recibiremos impulsos para proseguir en la búsqueda de nuestra verdadera identidad, valores e imagen.

El V.M. Samael, con justa razón, nos legó su obra CURSO ZODIACAL para que, ciertamente, seamos asistidos por estas influencias siderales y alcancemos el DESPERTAR DE NUESTRA CONCIENCIA.

Por otra parte hemos de señalar la presencia de un ángel intermediario situado entre el V.M. Aberamentho ─Jesús─ y el propio Moisés. Este ángel hace referencia a los portavoces jerárquicos de tipo angélico ─Maestros de la Blanca Hermandad─ encargados de hacer que circulen las enseñanzas sagradas de los grandes iluminados.

Curiosamente, este ángel lleva una túnica en la cual se detalla la llegada a nuestro mundo del SALVADOR SALVANDUS.

Dicho ángel levanta un velo que cubría la cabeza del bendito Moisés y de ella brotan rayos de luz divina, señalándonos que este gran SER estableció con sus DIEZ MANDAMIENTOS la ética que habrían de seguir todos aquellos y aquellas que se dedicaran a investigar los misterios del Altísimo. No cabe duda de que Moisés realizó, no solamente enormes prodigios ante las multitudes, sino que, asimismo, abonó el terreno para la posterior llegada del Gran Kabir de Galilea.

No exageramos si decimos que la trompeta que entrega el ángel a Moisés nos indica que este gran iluminado ─Moisés─, ciertamente, tocó su trompeta ante las muchedumbres en su tiempo. Muchos lo escucharon y lo siguieron y otros obviamente que no. Esto siempre ha sido de esta manera, pues no siempre toda la humanidad está preparada anímicamente para recibir la luz.

De la cabeza del ángel brota fuego y la misma está coronada por una diadema divina, lo cual le concede autoridad espiritual para presentarse ante las dos grandes figuras a las que estamos haciendo referencia desde el inicio de nuestro tema.

Por encima de la cabeza de Moisés observamos una trompeta que sirve para mostrar un estandarte en el cual aparece en mayúscula la letra M para hacernos ver que se trató y se trata de un Maestro Resurrecto, aunque nuestro lector podría creer que se trata de las dos letras M indicativas del título de la obra Misterium Magnum si la confrontamos con la otra M que se puede leer en el estandarte que sostiene el V.M. Aberamentho con su mano izquierda y que ha de interpretarse como la anunciación del Mesías, esperado desde entonces por el pueblo judío y los gnósticos precristianos. Estos últimos lograron darse cuenta de que el ansiado Mesías era, ciertamente, el V.M. Aberamentho, y de allí que su crucifixión ratificó al mismo como EL HIJO DE DIOS.

Hay que hacer notar que el ángel que está en medio de estos dos titanes divinos lleva en su cintura una llave muy peculiar. Esta llave alude a que, mediante las enseñanzas traídas a nuestra humanidad por el V.M. Aberamentho, tendríamos acceso a los cielos superiores de Conciencia o reino del Padre. Tal llave es el mismísimo ARCANO A.Z.F.,sin el cual es imposible que fabriquemos alma y sea borrado de nuestro continente anímico el pecado original…..

El ángel parece estar diciendo a Moisés: «Con tu mensaje has preparado el camino para que ahora todos los velos sean rasgados», pues ha llegado el momento de la actuación del CHRESTOS MESIÁNICO.

Detrás del ángel empieza a visualizarse la figura del divino redentor ─Jesucristo─, quien porta en su mano derecha un ramo de lirios. El lirio, como flor, es la imagen de las tres fuerzas de la creación, y por ello muchos siglos después fue adoptado por las realezas cristianas como símbolo en sus banderas y estandartes.

Jesús está rodeado de las cifras que van del número 1 hasta el número 12. Es incuestionable que el número 12 es alusivo a las doce partes autónomas y autoconscientes de nuestro propio Ser, así nos lo ha informado nuestro bendito Patriarca, el V.M. Samael, en su obra póstuma LA PISTIS SOPHIA DEVELADA. Cada apóstol existió en realidad históricamente, empero, en ocultismo verdadero, tales apóstoles están dentro de nosotros mismos y están ligados a la potestad de nuestro CRISTO ÍNTIMO.

Resulta incontestable que debemos resaltar la corona que lleva en su cabeza el Maestro de Maestros. Esto lo convierte en REY DE REYES Y SEÑOR DE SEÑORES, pues el bendito crucificado es la autoridad suprema de la bendita Logia Blanca y por eso lo llamamos a veces el LOGOS SOLAR… Esta afirmación nada tiene que ver con el Logos Michael, regente del astro rey de nuestro sistema solar. Sin querer redundar en lo antes indicado, volvemos a señalar el estandarte que lleva en su siniestra el bienamado Kabir de Galilea para que lo identifiquemos como el MAGISTER SUPREMUM que ofreció en sacrificio magistral su propia vida para mostrarnos sintéticamente, con sus propios hechos, el camino a seguir para alcanzar nuestra liberación suprema.

Jesús y Moisés (detalle), Jacob Böhme
Detalle de nuestro grabado.
Jesús y Moisés (detalle), Jacob Böhme
Otro detalle de nuestro grabado.

Permitidme ahora dejaros unas frases para la reflexión:

«Es mejor ser loado de los pocos sabios que burlado de los muchos necios».
Cervantes

«El precio de las cosas depende de su mérito, jamás de su epíteto».
Shakespeare

«El mérito de los hombres tiene su sazón, como los frutos».
La Rochefoucauld

«No es grande hombre quien sabe mucho, sino quien ha meditado mucho».
Settembrini

«Es conveniente meditar un día después de haber leído una hora».
Massillon

NEC TEMERE NEC TIMIDE.
─‘Ni temerario ni temeroso’─.

KWEN KHAN KHU

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