El Parsifal develado
Parsifal develado, el

El Parsifal, la gran ópera, obra mayúscula del insigne músico alemán Richard Wagner, ha constituido durante siglos un legado portentoso en el cual se mezclan maravillosamente las notas musicales con el drama significativo de la real filosofía hermética que el propio Wagner compartía en su vida personal. Sí, amable lector, Richard Wagner era, a la par, uno de los grandes maestros del arte y, por otra parte, un gran místico o Adepto de la Blanca Hermandad.

Solo así se explica que sus trabajos descomunales en materia musical estén ligados a misterios unidos a la búsqueda del Santo Grial, a las luchas contra la mala orientación de la libido sexual, a las guerras que entrañan los combates contra los deseos que atan el alma humana a esa prisión que llamamos materia, etc., etc., etc.

Lejos de considerar al rey Arturo y a su célebre cofradía de doce caballeros como un simple mito, la cruda realidad de esa supuesta leyenda es que el rey Arturo y sus doce potestades no son otra cosa que la réplica sacrosanta del Gran Kabir de Galilea y sus doce Apóstoles, nada más y nada menos.

Empero, el misterio no termina aquí, caro lector, pues gracias al Gnosticismo contemporáneo emanado de la pluma del venerable místico Samael Aun Weor, hoy sabemos, además, que tanto el CRISTO como sus doce Apóstoles también están en las profundidades íntimas de cada persona, formando parte de las energías autoconscientes y autónomas que constituyen eso que Shakespeare llamó, oportunamente, el SER.

Erradicar de cada criatura humana aquello que constituye el NO SER, vale decir el EGO ANIMAL y sus múltiples facetas o agregados psicológicos, significa emprender una aventura que habrá de llevarnos a la más elevada e importante conquista jamás imaginada por el ser humano, la cual no es otra que la conquista de sí mismo. He aquí el verdadero fondo de este magno tratado que ahora tienes entre tus manos, amable lector, y que pasa a convertirse por ello en una de las joyas de la literatura clásica desvelada por la Conciencia iluminada de su autor: V.M. Samael Aun Weor.

Por ello, te invitamos a hojear estas doradas páginas, pues en las mismas descubrirás el ansiado néctar de la auténtica sabiduría, la misma que habrá de conducirte hasta el castillo de Camelot o morada suprema de tu fracción de eternidad…

Kwen Khan Khu

0 Comentarios

Contesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*