Muy amados amigos y amigas:
Os hago llegar, en esta ocasión, un grabado interesante que, dada la profundidad que contiene, lo hemos bautizado como…
…EL MISTERIO DE LA SANTÍSIMA TRINIDAD
El autor de esta pieza artística se llamó Jacques Granthomme, vivió entre 1588 y 1622 y nació en Douai. Fue publicada primeramente en París y más tarde en Heilderberg.
Para nosotros los gnósticos este grabado posee una importancia trascendental, pues nos permite concebir aquello que para las iglesias católica y ortodoxa fue calificado como dogma de fe. Incuestionablemente, estas iglesias fracasadas, al haberse desligado de la Kábala y del esoterismo primitivo cristiano, quedaron convertidas en un esqueleto religioso-misticoide que no es capaz de entender la verdadera naturaleza del SER.
Aquí se nos muestra al SER ─Dios─ dividido en otras dos partes más: EL HIJO Y EL ESPÍRITU SANTO. Gracias a la Kábala gnóstica nosotros podemos entender que el SER ─Dios en nosotros─ es múltiple y, hablando metafóricamente, podríamos decir que es como un ejército de niños.Tal ejército diríamos por ello que está constituido por cuarenta y nueve partes autónomas y autoconscientes, y cada una ellas tiene determinadas funciones trascendentes y trascendentales en nuestro recorrido anímico cuando ansiamos la integración con nuestra realidad interior.
Es importante, ante todo, saber que los tres rostros de Dios aluden directamente a las TRES FUERZAS PRIMARIAS DE LA CREACIÓN, sin las cuales sería imposible que cualquier cosa pudiese cristalizar.
Posteriormente, en los cuatro ángulos de esta imagen aparece la representación de los cuatro elementos, señalados por un león ─símbolo del fuego─, seguido por un ángel ─que alegoriza el agua─, posteriormente podemos apreciar un toro alado ─símbolo del elemento tierra─ para terminar observando un águila ─representativa del elemento aire─. No hace falta enfatizar que estos cuatro animales simbólicos son la señalización de los cuatro evangelistas presentes en el Nuevo Testamento, a saber: Juan ─representativo del agua─, Marcos ─que alegoriza el fuego─, Mateo ─que figura la tierra─ y Lucas ─que nos indica el elemento aire─.
Gnósticamente hablando, hemos de decir que, esotéricamente, no se trata de mostrar los elementos materiales tal y como los conocemos, sino que cada uno de ellos es una materia prima con la que debemos elaborar nuestra Piedra Filosofal. Así, entonces, apreciamos a Mateo, que en tal caso apunta hacia nuestra Tierra Filosofal ─nuestro cuerpo físico─, Lucas indicativo del aire que respiramos, Juan como icono viviente de nuestras aguas mercuriales y Marcos aludiendo a nuestro azufre filosófico o fuego erótico…
Seguidamente nos encontramos con unas frases escritas en latín que nos dicen:
PATER NON EST FILIVS. Traducción: ‘El Padre no es el Hijo’.
PATER EST DEUS, FILIVS EST DEVS. Traducción: ‘El Padre es Dios’, ‘El Hijo es Dios’.
Y en la parte de abajo del grabado se nos muestra en forma encriptada la frase:
SPVS-SCTVS EST DEUS. Traducción: ‘El Espíritu Santo es Dios’.
Cuando se dice PATER NON EST FILIVS ─traducción: ‘El Padre no es el Hijo’─, hemos de entender, por otra parte, que ciertamente el Kether o Mónada Divina es el Primer Logos; en cambio, el Cristo ─el FILIVS─ es el Segundo Logos ─Chokmah─. Sin embargo, cuando los Apóstoles preguntaron a Jesús: «¿Cuándo veremos al Padre del que tú nos hablas?», entonces él les respondió: «Quien ha visto al Hijo ha visto al Padre»…, pues en el fondo son parte del Triángulo Logoico de la Kábala hebraica.
Además, sin lugar a dudas, el Espíritu Santo es nuestro mediador con todas las partes autónomas de nuestro SER, pues Él es el fuego regenerador, purificador y redentor de todos nosotros. Este fuego quedó representado para la posteridad en la palabra INRI,palabra esta que ha sido tomada por el clero católico para significar únicamente Iesvs Nazarenvs Rex Ivdaeorvm, ‘Jesús de Nazaret, rey de los judíos’, con el propósito de querer demostrar que el V.M. Aberamentho, a pesar de haber sido crucificado, resucitó y se convirtió para siempre en el rey de los judíos.
Empero, para el ocultismo de raíces profundas esta frase tiene varios sentidos y entre ellos Igni Natvra Renovatur Integra, ‘El fuego renueva toda naturaleza’, haciendo referencia al fuego alquímico que es capaz de transformarnos radicalmente, crearnos una verdadera alma e integrarnos con nuestro Espíritu divino ─léase: el SER─.
Así, de esta manera, podemos ver que, durante la Edad Media y algunos siglos después, muchos pintores y creadores de grabados conservaban, en secreto, muchos conceptos gnósticos que trataban de hacer llegar a las multitudes a pesar de las imposiciones brutales del clero dogmático y de las amenazas de la excomunión.
Os hago llegar finalmente una frases para vuestra reflexión:
«Dios es la verdad y a nosotros nos toca descubrirla».
Juan de Muller
«Suprimid a Dios y se habrá hecho la noche en el alma humana».
Lamartine
«Dios es el Maestro y enmendador de los sabios».
Fray Luis de Granada
«Amigos míos, Dios me es necesario porque es el único ser que puede amar eternamente».
Dostoievsky
«Todo cuanto me muestra Dios en mi interior me fortalece. Todo cuanto me lo muestra fuera de mí me debilita».
Emerson
DE PROFUNDIS.
─‘Desde las profundidades’─.
KWEN KHAN KHU